En este video se aborda el desafío de distinguir entre evaluación formativa y calificación en la práctica educativa. Se explora cómo la medición tradicional del aprendizaje – basada en números y entregables – ha limitado nuestra visión, impidiendo que los alumnos comprendan su proceso real de aprendizaje.
El contenido reflexiona sobre:
- El origen histórico de la calificación: cómo surgió en el siglo XIX para fines administrativos.
- La esencia del aprendizaje: los estudiantes expresan momentos de avance, no el aprendizaje completo.
- La evaluación formativa: un proceso que impulsa la retroalimentación y responsabiliza al alumno de su propio aprendizaje, fomentando la reflexión sobre por qué y para qué se aprende.
- El reto en distintos niveles: especialmente en secundaria, donde el enfoque en la calificación ha dificultado que los alumnos asuman su responsabilidad en el proceso educativo.